Este árbol pertenece al género Quercus, nombre latino de la encina y el roble europeos. El epíteto virginiana refiere su origen, concretamente al estado de Virginia, si bien está presente en todo el sureste de los Estados Unidos hasta Texas, y con presencia en zonas del norte de México.

Se considera un árbol simbólico de los estados del sur de Estados Unidos, ya que es una de las especies más representativas de los paisajes sureños de Estados Unidos, lo que ha potenciado su uso como especie ornamental en sus calles y jardines. Como otras quercíneas, esta especie puede ser muy longeva: un ejemplar en Carolina del Sur llamado "Angel" tiene una edad estimada de 1.500 años.

Su madera, dura y resistente, se ha utilizado en construcción de botes y barcos. Sus bellotas son comestibles, aunque no muy apreciadas.